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María Sánchez: febrero 2010
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Las palabras son mitad de quien las escribe. Y mitad de quien las lee. Él va llevando consigo la guillotina. Que al final pueda decapitar al verdugo. Déjame ser lo que si puedo ser en ti. Las personas especiales no siguen ningún tipo de ruta,. Destino o camino,. Sencillamente porque no existe uno que refleje. Con exactitud sus huellas. En la distancia de la indiferencia -fingida-. Que determinan los efectos de mis causas,. Está el fin de tus medios. La diferencia entre la verdad y la mentira,. Estoy susu...
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María Sánchez: enero 2010
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Déjame ir en paz,. No exhumes los restos de mi dolor. Déjame enterrar mi recuerdo,. En latitudes donde mi ser. Descanse al fin de tu presencia. Déjame velar mi alma. A la sombra de un adiós. Cual pena que busca el cause. Al mar de tu olvido. Déjame acariciar los rastros. De esta mísera existencia,. En los perímetros de tu recuerdo. Déjame contemplar en tus labios,. La completa expiración de mi existencia. Sin tu aliento dándome vida eterna. Suscribirse a: Entradas (Atom). Ver todo mi perfil. 4) El escrit...
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María Sánchez: octubre 2009
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Ahí hay. ay amor. Ahí hay. ay amor. Culpable de mis soluciones e. Incansable hacedor de oportunidades. Una vez más,. Me ha hecho víctima del. Que no he de merecerme. Mi insensatez me grita. Que soy un producto de mi imaginación. Continúo tratando de entenderme. Pero todavía me estoy buscando. Y aunque de nada sirva. Decir lo que se siente,. Si del otro lado. Ya no se quiere escuchar,. En cada beso que te sueño,. La dulzura de tu aliento. Colma de existencia mi ser. Más allá de las idas. Ver todo mi perfil.
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María Sánchez: Cara o cruz
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La idea me aterraba pero al mismo tiempo seducía. Buscaba coartadas entre las góndolas atestadas de libros y films de espanto. Sin embargo, una extraña sensación de recelo continuaba invadiendo mi serenidad. La ejecución de la estrategia impoluta, la exquisitez de cada paso hacia lo inevitable en mí y el deber de la moral se conjugaban en mi mente a cada paso. Tras pensarlo concienzudamente, le dejé al destino resolver en mí y eche mi suerte a rodar. Al despertar, busqué desesperadamente la moneda. L...
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María Sánchez: julio 2009
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En una añeja y recóndita aldea, había un sendero en el cual la tierra era fértil, rica en nutrientes y abundante en agua. Pero, extrañamente, en aquel sitio sólo crecía una variedad de flor exótica jamás vista. Aquella extraña flor, no sólo sorprendía por su morfología, sino por su estado. Ya que al florecer, lo hacia marchita. Luego de podada la flor, la preciosidad de su perfume, tersura y frescura no disminuyó con el paso del tiempo. Lapso que se prolongó. Cuando el tiempo pasó, aquel valiente joven s...
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María Sánchez: Otoño sin alma
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El asesinato del músico nocturno. Aún resplandecía tenuemente el sol entre la otoñal tarde, cuando comenzaba a apoderarse serenamente del aire la fresca brisa del atardecer. Todas las emociones, defectos y virtudes, habían decidido reunirse en casa de. Quien había cedido gentilmente su cálido hogar con un solo fin, ayudar a la desconsolada Alma. Allí todo era un gran alboroto, un dulce y cálido alboroto. Incluso unos cuantos metros antes de llegar a la entrada principal, podía escucharse…. Reclamaba -eno...
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María Sánchez: mayo 2011
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La idea me aterraba pero al mismo tiempo seducía. Buscaba coartadas entre las góndolas atestadas de libros y films de espanto. Sin embargo, una extraña sensación de recelo continuaba invadiendo mi serenidad. La ejecución de la estrategia impoluta, la exquisitez de cada paso hacia lo inevitable en mí y el deber de la moral se conjugaban en mi mente a cada paso. Tras pensarlo concienzudamente, le dejé al destino resolver en mí y eche mi suerte a rodar. Al despertar, busqué desesperadamente la moneda. L...
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María Sánchez: El asesinato del músico nocturno
http://bagajeliterario.blogspot.com/2010/03/el-asesinato-del-musico-nocturno.html
El asesinato del músico nocturno. El asesinato del músico nocturno. El sudor recorría mi rostro lentamente aquella tortuosa noche de verano. Mi cuerpo fluctuaba a diestra y siniestra en mi lecho con la esperanza de, al menos por un instante, dejar de percibir su ensordecedor y desesperado sonido. Te atrapé maldito grillo. Gracias por escribir. tan bien. Me parece demasiado microrelato -me reconozco de literaturas más densas y palabras más sensuales- pero esté bien planteado salvo que das demasiadas pista...
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María Sánchez: junio 2009
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Mi alma, sempiterna esclava. A las riendas de tu fascinación. Tu cuerpo, mercenario. Que subleva cada territorio de mi piel. Mi memoria, templo sagrado. Tu olvido, cruel inquisidor. Mi sospecha, escalpelo. Que despedaza tu paciencia. Tu certeza, zurcido. Que sutura mis dudas. Mi voz, verborragia. Que brota de tu aliento. Tu silencio, mudez. Que marchita mis palabras. Suscribirse a: Entradas (Atom). Ver todo mi perfil. María Sánchez en la web. Mi ficha REMES (Red Mundial de Escritores en Español). 4) El e...
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María Sánchez: marzo 2010
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El asesinato del músico nocturno. El asesinato del músico nocturno. El sudor recorría mi rostro lentamente aquella tortuosa noche de verano. Mi cuerpo fluctuaba a diestra y siniestra en mi lecho con la esperanza de, al menos por un instante, dejar de percibir su ensordecedor y desesperado sonido. Te atrapé maldito grillo. Quien había cedido gentilmente su cálido hogar con un solo fin, ayudar a la desconsolada Alma. Desde hacía un tiempo, todos notaban cuan triste y ausente se encontraba. Ella había d...
