cuentosdecesarragusa.blogspot.com

sonetosdecesarragusa.blogspot.com

Cien Disparos en la Sien: Descorazonado

http://sonetosdecesarragusa.blogspot.com/2008/09/descorazonado.html

Cien Disparos en la Sien. Crónica de dos Muertes. Debo limpiar mi corazón, hoja a hoja. Barrer con la escoba del olvido. Su piso de otoño enrojecido. Su jardín arruinado, su fuente roja. Apago la vela de la esperanza. Soplo el soplo del amor consumado. Los pies descalzos, las huellas del pasado. Reunidas en la hoguera de mi casa. Corazón que yo habito, mi corazón. Abandonado y roto pero vivo. Larga tarea contra la hojarasca. Lentamente abriré el caparazón. Lo privaré del recuerdo corrosivo. Había un cora...

ensayosdecesarragusa.blogspot.com

Contados Ensayos: Desfigurado

http://ensayosdecesarragusa.blogspot.com/2008/09/desfigurado.html

Uffff elevadísimo para mi. 27 de enero de 2009, 5:24. Publicar un comentario en la entrada. Suscribirse a: Enviar comentarios (Atom). Ver todo mi perfil. Nació en Mendoza el último de los años sesenta, cuando ya se diluía en el mundo la esperanza hippie y se preparaba la Argentina para entrar en su década infame. Se crió bajo el sonido remoto de las bandas militares y los estridentes comunicados del estado mayor conjunto. Los Salmones de la Finca. Cien Disparos en la Sien.

literaturadecesarragusa.blogspot.com

Para el Olvido: AMANECIDAS a cielo abierto

http://literaturadecesarragusa.blogspot.com/2008/09/amanecidas-cielo-abierto.html

AMANECIDAS a cielo abierto. Aquí voy, Vida. En los pasos en el puño. Desangrando en la tarde. Los jirones del grito. El cielo se ha abierto otra vez. Para ahogarme de azul. Y los templos desbordan. Sumido en el rumor del silencio. Perdido entre las voces. Arrojando de mí toda duda. Desnudo y deshecho y en llamas. Como partido al ocaso. Entre pájaros de fuego. Somos de tierra en el aire. De penumbra en la tierra. Palabra caída del sol. Que se perdió en el barro. El aliento me entra y me sale. Ya les llega...

literaturadecesarragusa.blogspot.com

Para el Olvido: BREVES graffitis de servilleta

http://literaturadecesarragusa.blogspot.com/2008/09/breves-graffitis-de-servilleta_11.html

BREVES graffitis de servilleta. La sed le llama cántaro. A este inmenso vacío. Y pasa un río por tu nombre. En un arrullo lejano. Es una tarde de noche. Sin silencio y sin palabras. De campanas y penumbras. En algún lugar de abril. Con las velas plegadas. Y las manos en vela. Con las voces desiertas. Con el alma lejana. Y alando sus jirones. Convoca a sus bandadas. Mi vida es muy pequeña. Quiero dejarla en el viento. Que la desate, y la deshaga. Y se la lleve. Que caiga en alguna lluvia. O a la nada.

sonetosdecesarragusa.blogspot.com

Cien Disparos en la Sien: Cuarto Menguante

http://sonetosdecesarragusa.blogspot.com/2008/09/cuarto-menguante.html

Cien Disparos en la Sien. Crónica de dos Muertes. El sexo sin amor de los divorcios. La amargura en la miel del desengaño. Lo que pasa en un día y dura un año. La quiebra por estafa en mis negocios. El corazón que miente y especula. Jugando al ajedrez de la mentira. El caballero, el rey. la dama mira. Se oculta tras su escote y disimula. Lo perdido por perdido que otra vez. Puede perderse de nuevo eternamente. Sin llegar a salvo hasta el olvido. Ese pudor de mostrarse del revés. O busco en el camino un c...

ensayosdecesarragusa.blogspot.com

Contados Ensayos: Fin

http://ensayosdecesarragusa.blogspot.com/2008/09/fin.html

Lo mueve algo peor que una perversión: la vida misma. Matar y morir, he ahí la vida ¡Cuánta hueca nostalgia de que algo exista! Muy buenas las cosas que leí. Ya pasaré de nuevo para continuar. Saludos. 20 de noviembre de 2008, 8:39. Publicar un comentario en la entrada. Suscribirse a: Enviar comentarios (Atom). Ver todo mi perfil. Los Salmones de la Finca. Cien Disparos en la Sien.

literaturadecesarragusa.blogspot.com

Para el Olvido: JOVENES PERDIDAS bloopers púberes

http://literaturadecesarragusa.blogspot.com/2008/09/jovenes-perdidas-bloopers-pberes.html

JOVENES PERDIDAS bloopers púberes. Quiero libertarme amor, quiero poder. Sumergirme, desahogarme, resurgir en vos. Tenerte en los ojos otra vez. Vivirte amor, quiero vivirte. Llegué tarde, tarde otra vez. Yo, que invoqué el fuego. Que clamé por el holocausto. Que salí del incendio. Con las velas quemadas. Yo, que quise irme de mí. Del hambre, del grito. Que quise abolir las plumas y las garras. Yo, que llegué tarde, que llegué a vos. Es aquí amor, es ahora. La misericordia de la tierra está perdida.

ensayosdecesarragusa.blogspot.com

Contados Ensayos: Rutina

http://ensayosdecesarragusa.blogspot.com/2008/09/rutina.html

Publicar un comentario en la entrada. Suscribirse a: Enviar comentarios (Atom). Ver todo mi perfil. Nació en Mendoza el último de los años sesenta, cuando ya se diluía en el mundo la esperanza hippie y se preparaba la Argentina para entrar en su década infame. Se crió bajo el sonido remoto de las bandas militares y los estridentes comunicados del estado mayor conjunto. Los Salmones de la Finca. Cien Disparos en la Sien.

sonetosdecesarragusa.blogspot.com

Cien Disparos en la Sien: Cuarto Creciente

http://sonetosdecesarragusa.blogspot.com/2008/09/cuarto-creciente.html

Cien Disparos en la Sien. Crónica de dos Muertes. Una mujer de miel bajo el ombligo. Las caderas gemelas del deseo. Los ojos tristes en que yo me veo. La piel de cautiva que persigo. Una mujer ajena y escondida. En las curvas del propio desatino. Una boca que embriaga más que el vino. Y la risa de sus pasos por mi vida. 191;A qué vino el amor con su desvelo. Amargando las noches que eran buenas. Poblando de fantasmas el consuelo? Corazones suicidas, sin remedio. Desordenada madeja de las venas. Que te de...

sonetosdecesarragusa.blogspot.com

Cien Disparos en la Sien: Diez menos Cuarto

http://sonetosdecesarragusa.blogspot.com/2008/09/diez-menos-cuarto.html

Cien Disparos en la Sien. Crónica de dos Muertes. Hay tetas que merecen dos sonetos. Y las hay para un libro cada una. Las tuyas compiten con la luna. Por ser musas de tantísimos sujetos. Febril acantilado el de tu escote. Donde fueron a caer labios suicidas. Harían falta una y mil vidas. Por probar cada parcela de tu dote. No se puede culpar la desmesura. Que ocasionan a los ojos y las manos. Cuando cedes al pecado y las ostentas. No hay palabra que calibre la hermosura. Ni pasión que reúna más hermanos.